El teletrabajo se implantó como una respuesta rápida a la problemática del COVID-19, pero ha supuesto tantas ventajas que muchas empresas han decidido implantarlo como su forma de trabajo definitiva. Por ello, es necesario que pasemos de los home office improvisados a despachos en casa en los que mantener un alto rendimiento pero, lo más importante, que sea un lugar de trabajo saludable.
Esta transformación de la oficina en casa en un home office saludable es un proceso sencillo si se conocen bien los pasos a llevar a cabo. En ACTIU, te damos una serie de consejos para que el ritmo de trabajo no esté reñido con el bienestar.
¿Cómo lograr una oficina en casa confortable?
Define un lugar de trabajo fijo
Para conseguir un home office saludable el primer paso es ubicarlo en un espacio tranquilo. Los ruidos suponen una gran distracción a la hora de desarrollar las tareas diarias y un inconveniente a la hora de realizar llamadas. Por ello, es importante situar el home office en una habitación lo más aislada posible de ruidos externos.
Evita zonas de paso y habitaciones compartidas como el salón o el dormitorio. Tómate tu espacio para diseñar tu home office cómodo, crea un lugar acogedor y equípalo con lo necesario para poder desarrollar tu jornada de trabajo.
Mobiliario ergonómico
Si tu home office debe guiarse por algo, es por la ergonomía. Esta es la capacidad de adaptación a tus características tanto físicas como psicológicas, y puedes lograrlo a través de muebles como los que encontrarás en nuestra tienda online.
La silla de oficina debe recoger tu cuerpo, ofreciendo confort desde la primera sentada. Además, es importante que se adapte a tus movimientos y te permita mantener una postura cómoda para evitar lesiones y problemas de salud futuros. En ACTIU ofrecemos una variedad de modelos de sillas ergonómicas con mecanismo Syncro con 4 posiciones de respaldo y con diferentes recorridos programados, como TRIM. Esta tecnología responde a los movimientos de la espalda mediante un sistema lumbar dinámico, que descarga la parte superior de cuello y espalda cuidando tu salud y bienestar físico.
En cuanto a la mesa de oficina, debe tener espacio suficiente para que puedas desarrollar tus tareas sin llegar a ser desproporcionada. Te recomendamos optar por una mesa elevable y combines la comodidad de trabajar sentado con los beneficios de trabajar de pie. Existen modelos como Talent 500, que incorporan un tablero plegable y ruedas para maximizar su funcionalidad.
La iluminación, un elemento fundamental
En un espacio de trabajo saludable debemos primar la iluminación natural, lo que ayudará a cuidar tu vista y a disminuir el consumo energético. El trabajo con luz natural también tiene beneficios a nivel psicológico, como la mejora del estado de ánimo y la regulación del sueño.
En caso de que no sea posible, es aconsejable preparar una iluminación indirecta con la que puedas trabajar sin forzar la vista. Es importante iluminar las áreas donde realmente haga falta y que sea de manera uniforme en todo el despacho.
Controla la decoración
Conseguir un espacio de trabajo saludable también va relacionado con minimizar los niveles de estrés. Para ello, puedes optar por una decoración que ayude a mejorar tu nivel de serenidad: paredes de colores claros para favorecer la concentración, evita mezclar varios estampados y equipa tu home office saludable únicamente con los elementos imprescindibles.
También es recomendable incorporar plantas, que aportan un toque fresco y crean una atmósfera relajada en la que poder mantener un nivel de bienestar óptimo.
Estos consejos, unidos a una rutina de trabajo estable y la realización de estiramientos periódicamente y el cuidado de la postura, te ayudarán a crear un home office saludable. Ponlos en práctica y aumenta el bienestar en tu jornada, aumentando a la vez tu rendimiento sin darte cuenta.