1. Aporta comodidad: Lo más esencial de una silla de oficina de uso 24 horas es que brinda la comodidad necesaria para pasar largas jornadas laborales. Las características esenciales de estas sillas hacen que el cuerpo se encuentre en una postura cómoda en todo momento, garantizando el bienestar del usuario.
2. Cuida de nuestra salud: Como resultado de una mala postura y de permanecer mucho tiempo sentado en una silla incómoda, pueden aparecer dolores lumbares, de cuello o de trapecio e incluso desarrollar el Síndrome del Túnel Carpiano. Incorporar una silla de uso intensivo en nuestra oficina ayuda a evitar y a prevenir estos tipos de dolencias y lesiones.
3. Aumenta la productividad: El confort que supone trabajar en una postura correcta repercute positivamente en la consecución de las tareas diarias. De esta forma, tener una mayor comodidad se convierte en una mayor motivación y energía para el empleado, lo que se traduce en un aumento de productividad.
4. Mayor calidad: Tanto el tiempo empleado en la investigación y diseño, como los materiales utilizados para la fabricación de una silla de oficina de uso 24 horas, convierten a este elemento en una pieza de mayor calidad y una durabilidad superior a las sillas convencionales.
5. Ahorro: En un principio puede que esta ventaja no se llegue a apreciar, pero en el largo plazo, adquirir una silla de uso intensivo supone un gran ahorro al mantener una buena salud del trabajador. Por otro lado, al estar fabricada con materiales de alta calidad, si se realiza un correcto mantenimiento, tendrá una vida útil más larga que otro tipo de silla.